TRADUCTOR DE TEXTOS:

jueves, 7 de febrero de 2013

Ded Moroz: El Padre del Invierno Eslavo


En las antiguas tierras del centro de la vieja Europa , en las tierras eslavas y rusas, un anciano rige en el invierno como una especie de espiritu o deidad tutelar, conocido con varios nombres: Ded Moroz (padre invierno) o Morozko. Es en apariencia un anciano o  un hombre mayor, cubierto con ricas pieles, de larga barba y cabello blancos. Como todo duende o elfo o entidad sobrenatural ligada al curso estacional, suele poner pruebas a sus victimas que suelen ser gentes humildes que se pierden en los bosques en la estacion fria.

. Famoso es el cuento de una pareja de humildes campesinos que tiene dos (o tres hijas),  la mayor es hija de un primer matrimonio del hombre  con una mujer muy hermosa pero extremadamente pobre y al igual que en el mito de Cenicienta y Blancanieves es odiada por su madrastra (esta segunda ya de posicion mejor y caracter mas agrio y voluble)  y obligada por la misma a hacer labores pesadas en el hogar para su servicio y el de sus hermanastras. Aprovechando que Marfucha (la hija mayor) estaba en edad de casarse la madrastra prepara una buena treta para desacerse de ella y casar a su hija con el pretendiente en lugar su lugar  y abusando una vez mas de su posicion le dice  a la joven que prepare sus cosas y obliga al marido a llevarla al bosque, y alli abandonarla para que la despose Morozko. El hombre resignado  y para no perder lo poco que le quedaria si su esposa le abandona y pensando aun en la otra hija que aun le queda por alimentar, aun casando a la primera hija de la madrastra con el pretendiente que habia asignado a su legitima hija, cumple con la orden de la mujer y deja a su  hija mayor en el bosque, diciéndole que pronto llegará su  futuro marido. 


El espectro  gelido del invierno  efectivamente se presenta ante ella , aparece ante la chica, y mientras se acerca a la joven, ella más frío siente y nota como empieza a entumecerse . —¿Tienes calor en tu pecho?— pregunta Morozko  por tres veces, acercándose cada vez más y enfriando el aire  con su aliento aún más, y cada vez que Marfucha responde: —Sí, tengo calor—, la última ya  vez con los dedos azules y casi sin poder respirar , el espiritu del invierno endurece mas el clima

. A la mañana siguiente el hombre va en busca de su hija ya resignado a que la ventisca de la noche haya terminado con su vida y triste por la idea de encontrarla tendida y sin vida y se sorprende de encontrarla viva caminando de regreso a casa. Morozco, había tenido piedad y la había cubierto con un fino abrigo de pieles y regalado un baúl lleno de joyas con lo que el futuro de la muchacha estaba mas que asegurado en lo venidero


. La madrastra sintió envidia de la suerte de la joven  y pensando que sus hijas no han de ser menos y han de gozar siempre de una posicion de dominio en la casa , llama a las dos hijas que tiene y tras contarles lo sucedido resuelve emviar  esa noche a su hija (o a ambas hijas) para ver si tenían mejor o al menos pareja suerte. Al llegar Morozco donde las jovenes les preguntó tres veces  como habia hecho con Marfucha y la historia del frio cortante cada vez mas intenso se repite  otra vez —¿Tienes calor en tu pecho?—, y incapaces de soportar la prueba y presas de un orgullo malsano las dos responden , —Hace un frío horrible—, tercia la primera —¡No ves que tengo las manos y los pies helados—, grita la segunda —Deja de molestarnos ya—. A la mañana siguiente  y espoleado por la madrastra el marido fue en busca de las hijas de la mujer y las encontró congeladas, tras llevarlas con su mujer  y celebrar el triste entierro y al comprender que su ambición había provocado la muerte de sus hijas, la madrastra hizo las paces con su hijastra.

Ded Moroz juega un papel similar al del Santa Claus o San Nicolas occidental en las tierras  del antiguo bloque oriental. Escondiendo regalos bajo un árbol en las celebraciones del solticio de invierno y año nuevo.

Ded Moroz es acompañado por su nieta Snegurochka (el hada de la nieve),  a la usanza de los espiritus elementales del norte viste pieles blancas y no usa renos como el Santa occidental, sino que su carro es tirado por tres caballos (blanco, rojo, negro) que simbolizan las fases del día (día, atardecer y noche). Este señor del invierno fue introducido en la tradicion y potenciado  por  la URSS soviética como una forma de reemplazar el homologo occidental.

Así, Bielorrusia se convirtió en su residencia oficial (no el polo norte). Se le conoce en Serbia como Deda Mraz, en Macedonia por Dedo Mraz y en Croacia como Djed Mraz; en Bulgaria es Dyado Mraz, (aunque actualmente es Dyado Koleda, “Abuelo Navidad”). En Eslovenia Dedek Mraz viste con pieles grises y en Polonia es Dziadek Mróz, en Rumanía se le conoce como Moş Gerilă. Hay que señalar que en todos estos países, tras la caída de la URSS, la presencia del mito del  padre de la  escarcha ha desaparecido  y  paulatinamente se ha vuelto a potenciar  la imagen de San Nicolas o Santa Claus.

No hay comentarios:

paganismo no es fascismo

paganismo no es fascismo