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jueves, 2 de mayo de 2013

BRINJAS, LAS CAMISAS DE HIERRO DE LOS GUERREROS DEL NORTE:


BRINJAS, LAS CAMISAS DE HIERRO DE LOS GUERREROS DEL NORTE:

A todos nos ha llegado (sobre todo por los relatos incluidos en las novelas del genero historico "vikingo" y tambien por imagenes contenidas en peliculas o incluso series de televisión), la imagen de un orgulloso guerrero del norte, lo que comunmente llamamos "vikingo", portando un hermoso yelmo de buho, (oakhelm) y su correspondiente cota de malla (brinja) como protecciones principales. Y sin embargo, este tipo de equipo, debio ser un rara avis en su tiempo entre las tropas nordicas, incluso, me atreveria a decir mas, muchos expertos dudan de si, realmente alguna vez, los nordicos llegaron a desarrollar y construir sus propias cotas de malla, las populares "camisas de hierro" o brinjas de las que las sagas nos hablan siempre en manos de los mas reputados guerreros o los mas nobles entre la horda vikinga.

Porque una primera cuestion ha de ser aclarada cuando nos referimos a estos preciados objetos de defensa personal en las batallas. Eran tremendamente caras y por lo tanto escasas en su epoca, al menos entre los nordicos. Las sagas nos hablan de cotas de malla que costaban "tanto como el resto del equipo de guerra de un buen jarl". Es decir, que por el montante en plata picada de una brinja, se podria costear una buena hacha de combate, un escudo, posiblemente un casco de cuero repujado o casquete de metal, y quizas con un poco de suerte, incluso un caballo!.  Con este desorbitado coste, esta claro, que las peliculas y la imagen romantica de una horda de guerreros ataviados todos con su brinja, es cuando menos, exagerada e irreal. Como mucho, podemos imaginar al jarl o caudillo de la hueste, que por status y riqueza personal, quiza contase con esta proteccion adiccional, ademas de los elaborados cascos con visera o mascara. Posiblemente, este formidable guerrero contase tambien con espada de bella factura, pero esta no sera la norma ni mucho menos en el grueso de su tropa.


Lo habitual sera encontrar al hombre del norte vestido con una pesada camisa larga de vadmal (tela de lana basta), quizas, apurando un poco el caso y imaginando el equipo de un vikingo de base, con un chaleco de cuero repujado y endurecido, quizas con suerte, una armadura simple tachonada de este material, vestida por encima de sus habituales prendas diarias. Igualmente, encontraremos que los cascos metalicos, no estan al alcance de todos, quiza lo comun es pelear con la cabeza descubierta  o tapada con un casco de cuero o un grueso gorro de piel. Tampoco las armas de un vikingo de base son excepcionales, los especialistas creen que lo mas probable es que combatiesen con hachas de batalla o simples hachas de trabajo, ademas de los populares sax (cuchillos de hoja ancha) que practicamente cualquier hombre libre pudiese poseer, ademas del poderoso y elemental escudo (rondr) de tilo de un diametro considerable como proteccion principal. Lanzas y arcos y flechas podrian ser tambien parte del equipo basico, a la postre, la caza es una actividad elemental entre estas gentes, asi que su uso no les seria para nada ajeno. Por supuesto tambien habia espadas, un arma de prestigio sin duda, aunque hoy por hoy, la mayoria de los expertos afirman que sin lugar a dudas, el arma base de un nordico era el hacha.

Los vikingos  eran hombres practicos, dados a  hacerse con cualquier objeto o  bien que pudiera serles util en sus incursiones, asi que, ya sea por haberla adquirido como parte de un botin en batalla o por tratarse de un hombre con recursos capaz de costearse su elevado coste, algunos guerreros de posición  pueden llevar una “byrnie” o cota de malla como parte de su equipo de guerra, hablamos básicamente de una pieza  que es en esencia una camisa de manga corta realizada a partir de anillos metalicos entrelazados. La mayoria de las veces según los estudiosos del tema suponen, estos anillos son finos eslabones circulares que se cortan y luego se unen, esta seria la esencia de las primeras cotas, que posiblemente no fuesen mas que una especie de “ponchos”, una larga tira de anillas de metal que se doblaba por la mitad en cuanto alcanzaba el doble de largo y  del ancho del torso de un hombre. Se practicaba un hueco en ella para introducir la cabeza y después se “cosia” por los laterales con tiras de cuero.   Hacia el 900 AC, no obstante, los anillos se martillean y dejan planos, se cortan, se unen y luego se sellan con remaches, reduciendo significativamente la perdida de la cota de malla debido a los golpes, estas serian las cotas mas elaboradas , aunque se discute si los nordicos conocieron la primitiva version o estas ultimas que ya podrian ser consideradas “camisas de hierro”. Con un buen acolchado detras, esta armadura protegia contra los golpes y los tajos, proporcionando una protecci6n efectiva contra espadas y hachas al menos en teoria. Basicamente se usaban para repeler flechas y golpes de tajo de armas de filo, las hachas danesas difícilmente podrian ser paradas con este tipo de protecciones. Obviamente los nordicos no conocieron ropas acolchadas bajo estas cotas, les bastaba vestirlas encima de sus prendas de lana para evitar el roce del metal contra la piel desnuda.




. Mientras en Europa los soldados van equipados con cota de malla desde los pies hasta la cabeza en prácticamente todo el medievo, los nórdicos raramente usan mas que una larga cota de malla generalmente sin mangas y con un faldon que les cubre casi hasta las rodillas. Sin embargo, la protección que ofrece al torso esta cara armadura es de gran valor a los jarls de Escandinavia. Una buena cota, era un presente digno de un señor de la guerra.La brinja era una camisa de malla, ampliamente abierta en los costados para reforzar la movilidad y facilitar el uso de los pesados escudos y el manejo del hacha y la espada. Ese era precisamente su punto debil, los costados no podian estar muy ajustados porque restarian mobilidad al estilo de lucha del hombre del norte.

Como hemos apuntado, se especula con que los nordicos jamas producieron cotas propias, mas bien las adoptaron en sus correrias, quiza importadas de Inglaterra o sus encuentros con los Francos, se sabe que los jarl las tenian en gran estima y que formaban parte de las posesiones mas preciadas, al igual que las trabajadas espadas que eran simbolo de status. Es probable que los maestros armeros se encargasen de importar estas preciadas brinjas, pero los expertos no se atreven a postular la posibilidad de que los nordicos llegasen a fabricarlas alguna vez.


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